martes, 3 de abril de 2012

AYUDA COMO PUEDAS




Me he tomado el atrevimiento de copiar este artículo del Periódico Rociero, escrito, por un gran rociero, de los que todos tendríamos que tomar ejemplo.-

Ayudar como se pueda:


Hacía mucho tiempo que no te tocaban tantas veces la puerta pidiendo ayuda. Ahora es casi un diario. Y hay muchas formas de ayudar aunque haya quien piense que si no tiene dinero no puede ayudar a otros.

En esta época tan difícil es misión de todos echarnos una mano. Si no tienes para poder hacer una donación económica, mira a ver cuántas medicinas tienes en el botiquín doméstico que nunca usas, que te la recetaron, te tomaste las que te hicieron falta y ya no volviste a necesitarla. Infórmate en una farmacia cercana, ve a cáritas por si hay personas que no pueden pagarse una medicina y dónalas para que ayudes a que otros se curen. Lo mismo puedes hacer con gafas que dejaste de ponerte porque te cambiaron la graduación en la óptica o en el oculista. Las puedes donar en lugar de tirarlas y otros podrán ver mejor de lo que ven ahora.

Hay muchas ONG repartidas por todas partes. Me dan remordimientos de conciencia cada vez que veo ropa tirada que está todavía bien, cuando hay colegios, parroquias y organizaciones que las piden a gritos porque hay gente que no tiene ropa.

A veces cualquier cosa que para nosotros carece de importancia para otros puede ser una salvación. Me he enterado de que están recogiendo tapones de plásticos y que con ellos se puede ayudar a salvar vidas o a hacer que una operación costosa para alguien pueda llevarse adelante. No cuesta nada tener una bolsita a mano y en ella ir echando los tapones de los tetrabrik que no nos sirven, o de las botellas de zumos, etc.

Una vez me dijo un cura rociero que la caridad es muy fácil practicarla, pero no queremos poner en práctica todos los modos que hay para ello y que como seguidores de la Virgen del Rocío no podemos estar quietos y si no es el momento de ayudar con dinero, se ayuda con alimentos, con ropa, con medicinas y con lo que haga falta.

Yo pensaba, ¿y si alguien no puede donar alimentos porque no tienen ni para ellos? Pero esto es un círculo y todos estamos dentro de ese círculo. Porque si alguien no puede ayudar con nada material, se puede ayudar con compañía. Da pena ver cuántos asilos necesitan de personas que estén dispuestos a pasar un ratillo con los mayores, y hospitales en los que hay enfermos a los que nadie va a visitar.

Yo paso de hablar de solidaridad, prefiero hacerlo de la caridad que no puede olvidársenos que hay que practicarla.

Hay niños que necesitan clases particulares y sus padres no se las pueden costear. Yo tengo una hija profesora en paro, y un día a la semana se dedica a darle clases a un grupito de siete niños que necesitan ese refuerzo en sus estudios. Ella dice que la Virgen se lo dará por otro lado y lo hace, porque también le da clases particulares a otros niños cuyos padres si se lo pueden permitir. Ella es la que nos puso las pilas a los de casa y nos enseñó muchos de estos métodos.

Yo desde luego, desde que lo practico me siento mucho mejor.

Ahora, por ejemplo, con algunas de mis vecinas de bloque y de barrio, nos dedicamos a coser cosillas para personas que lo necesitan. No siempre hay tallas para todo el mundo y hay prendas que con unos arreglitos les puede venir bien a alguien, pues eso hacemos, los arreglos para que haya ropa para todos los que ahora mismo no se la pueden comprar.

Lo que quiero expresar es que no podemos estar de brazos cruzados viendo que otros lo pasan mal, hay que ayudar como se pueda porque nunca sabemos lo que podremos llegar a necesitar nosotros mismos. En conciencia, como rocieros que somos, tenemos que actuar cada uno dentro de sus posibilidades, que es un deber como cristianos y la Virgen del Rocío nos necesita porque muchos llegan a sus plantas desesperados y no la podemos dejar sola con toda la carga, ayudémonos a ser mejor cristiano.-

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