HACIENDO HERMANDAD

Rocío... cauce de espiritualidad cristiana, de fe y alegría, fuente inagotable de inspiración y de devoción mariana en torno a la Virgen María, Blanca Paloma, Reina de las Marismas. Devoción variada y distinta en las expresiones, rica y colorista en la forma de decir, extraordinariamente sonora en cantares y palmas, pero profunda y recogida, íntima y callada en la oración. Así es el Rocío, cuyas fronteras se difuminan en las marismas de la fe y en el  sentimiento del alma andaluza. Y el pueblo que camina, y que canta y que reza y la venera.

   Para muchos de esos romeros que van al Rocío, el amor a la Virgen se convierte en verdadero camino por el que encontrar a Cristo. Otros, han encontrado en el Rocío la mano amiga, la verdadera fraternidad, y han descubierto en la Iglesia una familia de Fe, festiva y gozosa, el servicio al hermano y la alegría de compartir con el que sufre. Otros han encontrado en la Virgen del Rocío un modelo perfecto de vida cristiana.

   Casi todos nuestros pueblos vecinos tienen hermandades rocieras. Cartaya, sin embargo, ha carecido de hermandad, aunque no de devoción a la Blanca Paloma, pues son  muchos los cartayeros que año tras año, rociados por esa misteriosa llama, caminan con fe y alegría para llegar hasta la aldea almonteña, bien aisladamente, bien con otras hermandades.

Partícipes de esa veneración y amor por la Virgen rociera, y conscientes de la falta que hacía en Cartaya  una hermandad que aglutinara en su seno a todos los que de alguna manera sienten ese especial amor a la Santísima Virgen del Roció, un grupo de cristiano y vecinos de esta localidad de Cartaya. Ellos ya en el año 1979, pretendían la creación de una Hermandad y así se lo manifestaron a los pastores de la Iglesia, pero al no cumplirse en su totalidad, las exigencias de la normativa de aquella época, hubo que desistir en el intento. Un poco de tiempo mas tarde este grupo se integro en la vida de la de la Hermandad de Ntra. Sra. del Roció de Ayamonte, nos fuimos incorporando, además de los lazos de amistad, compañerismo, solidaridad y de más valores humanos, en la vida activa: participamos en sus cultos y celebraciones, en su peregrinaciones etc.., incluso en sus cargos directivos; y con el tiempo se han creado verdadero lazos de unión, hermandad y confraternidad. Aunque somos de distinta localidad pero nos une la misma Fe y la misma devoción Maria Ntra. Sra. del Roció del Espíritu Santo.

   Una noche del camino del 1999 al terminar de rezar el Santo Rosario, el entonces Hermano Mayor D. Fernando Romero, nos propuso que la Hermandad de Ayamonte fuera la Madrina de la Hermandad de Cartaya, aquello nos lleno de ilusión, y en  marzo del 2000 empezamos a dar los primeros pasos para formalizar la Hermandad:- Y el  16/07/2009 fue Erigida por Decreto Episcopal, canónica  con el nombre de Hermandad de Ntra. Sra. del Roció de Cartaya. Y no es que sea casualidad es que la Virgen así lo quiere, esa proposición que fue hecha por Fernando Romero, este año ya se va a realizar oficialmente el nombramiento de Amadrinamiento a nuestra Hermandad, por el Hijo de  Fernando Romero.-

Consejo a los que no van:

Si tu eres de los que cuando suena el tamboril o se mueve tu simpecado, te entra hormiguilla por el cuerpo y te brotan las lagrimas pensando en que no puedes ir, vete al Roció como sea, pero ve no digas que no vas por que es muy caro y no tienes dinero, el Roció ni es caro, ni es barato es como cada uno quiere que sea, el Roció es del pobre es del rico el Roció es Fe, Amor y Sentimiento; vamos para el Roció que la virgen nos espera.

Viva La Virgen del Roció y Viva su Santísimo Hijo.-